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Aunque la Universidad “planea” demoler el edificio Wentworth a finales de 2025, Honi se pregunta por qué el Consejo Representativo de Estudiantes aún no se ha movido.
¿Secreción nasal o congestión nasal? ¿Tosiendo? ¿Irritación de los ojos y la piel? ¿Estornudos? ¿Ojos llorosos? ¿Sibilancias? ¿Incluso los ataques de asma? ¡Felicidades! Debes trabajar en el sótano del edificio Wentworth de la Universidad de Sydney.
En los últimos años, el Consejo Representativo de Estudiantes ha informado a la Universidad de varios problemas de moho y fugas, el más reciente de los cuales en la casa de Honi en la oficina de Langford, completamente sin ventilación. Numerosos trabajadores anteriores y actuales del SRC han sufrido graves consecuencias para su salud por trabajar en el sótano de Wentworth, hasta el punto de sufrir daño pulmonar crónico. Aunque la Universidad “planea” demoler el edificio Wentworth a finales de 2025, Honi se pregunta por qué el Consejo Representativo de Estudiantes aún no se ha movido.
Honi habló con Carmeli Argana, quien editó el artículo con CAKE en 2022. A Argana le diagnosticaron problemas respiratorios crónicos durante su mandato como editora y experimentó “ataques de tos continuos y realmente perturbadores” que le imposibilitaron trabajar en Wentworth. sótano. Los médicos informaron a Argana que el entorno del consultorio de Honi era el culpable y le recetaron medicamentos para el asma. Los patrones de sueño de Argana se interrumpieron y se despertaba tosiendo en medio de la mayoría de las noches; También le dijo a Honi que después de su mandato, su sistema respiratorio se volvió más susceptible a los alérgenos.
Argana no fue el único editor de CAKE afectado. Su colega, Zara Zadro, calificó el moho como un “factor que contribuye a los terribles dolores de cabeza y fatiga” y a las “náuseas y dolores de estómago” que experimentó durante todo el año, particularmente después de jornadas de descanso de quince horas. Argana y Zadro se vieron obligados a trabajar al aire libre, separados del resto de su equipo, y Argana, como joven relegada al espacio público “tan tarde en la noche”, denuncia los riesgos de seguridad que esto supuso.
Los editores actuales comparten los sentimientos de CAKE. La mayoría de nosotros sufrimos síntomas en los días siguientes a la bandeja: dolor de garganta, dolor de cabeza, congestión y tos. Sin embargo, una preocupación seria es cómo se han visto afectados los editores asmáticos de Honi: nuestro asma ha empeorado significativamente desde que comenzamos nuestro mandato como editores. Después de las bandejas del domingo, respiramos con dificultad durante casi toda la semana; Además, durante las vacaciones de invierno y lejos de la oficina, nuestros síntomas desaparecieron. La relación causa-efecto aquí es obvia.
¿Quién es responsable de mejorar la situación del moho en el sótano? Lia Perkins, presidenta del Consejo Representativo de Estudiantes, confirmó a Honi que, según un acuerdo entre el SRC y la Universidad, es responsabilidad de la Universidad proporcionar al SRC un lugar de trabajo seguro. De acuerdo con la Ley de Salud y Seguridad de Nueva Gales del Sur de 2011 y el Reglamento de Seguridad y Salud en el Trabajo de 2017, es probable que la Universidad y el SRC sean considerados "personas que dirigen un negocio o empresa", o PCBU. En esta función, ambas partes tienen el deber intransferible de "eliminar los riesgos de seguridad en la medida en que sea razonablemente posible" y, si esto no es posible, "minimizar los riesgos en la medida en que sea razonablemente posible".
Honi confía y está agradecido de que el SRC esté haciendo lo que sea razonablemente posible para minimizar los riesgos de seguridad. El SRC organizó pruebas de moho y una limpieza exhaustiva de la oficina de Honi, brindó consejos claros sobre cómo prevenir problemas de polvo que podrían empeorar los síntomas del asma, ayudó al equipo a presentar informes de incidentes, solicitó reservas de habitaciones de reemplazo para que no estemos obligados a usar el oficina, y han estado en comunicación regular con nosotros para llegar a una solución práctica y segura.
Sin embargo, lo que razonablemente no está en el poder de la SRC es eliminar los riesgos de seguridad: es responsabilidad de la Universidad. Perkins confirmó que la Universidad ha tratado casos anteriores de moho en el sótano de Wentworth, citando el "espacio de recursos, las salas de servicios legales y, hasta cierto punto, la oficina del presidente debido a su proximidad a la sala de refrigeración de Wentworth". Dijo que ya no hay moho en esas áreas y que, tras informes más recientes de moho en la oficina de Honi, el SRC está volviendo a realizar pruebas en las habitaciones. Sin embargo, Honi cuestiona hasta qué punto el tratamiento del moho es sólo una solución de curita de la Universidad, especialmente en un edificio destinado a demolición.
En un comunicado proporcionado por la Universidad, afirmaron que han contratado a un "proveedor especializado para realizar inspecciones periódicas y tratar cualquier problema que surja". Además, alentaron a Honi a hacer funcionar nuestro aire acondicionado, gracias. En particular, la Universidad nos está cobrando por reservar una sala de descanso de reemplazo: es indignante que la Universidad exija un pago por un lugar de trabajo seguro.
El tratamiento que merece la SRC, y la solución obvia que eliminará por completo los riesgos de seguridad para sus trabajadores, es la reubicación. “En febrero, la Universidad aprobó el traslado a nuestro espacio de oficinas a través de la infraestructura SSAF (tarifa de servicios estudiantiles)”, dijo Perkins. “Me he reunido con ellos dos veces, pero siempre me han dicho que 'no hay espacio en el campus al que mudarnos'”. La declaración de la Universidad, sin embargo, parece indicar un retroceso en lo que Perkins denominó una “aprobación”: afirmaron que la reubicación de la oficina de SRC está simplemente en una “lista corta” de Proyectos de Infraestructura SSAF aún no aprobados, ya que el “proceso de determinación del alcance” y considerar opciones de reubicación adecuadas”, continúa.
La declaración de la Universidad también parece indicar que la demolición de Wentworth todavía está en el aire. "Esperan presentar un caso de negocio para su aprobación el próximo año" y son claros en formular su afirmación de manera hipotética: "si el proyecto avanza, el trabajo se llevaría a cabo entre 2025 y 2027". Esto no sólo no tiene en cuenta cómo los trabajadores pueden permanecer de forma segura en el SRC de aquí a 2025, sino que tampoco deja claro cuándo se llevará a cabo realmente la demolición.
Si el sótano del edificio Wentworth ya no es un lugar de trabajo seguro, y si el futuro del SRC en Wentworth parece ser indefinido, la Universidad debe proporcionarnos una pronta reubicación: no hacerlo es claramente derogar el deber de diligencia debido a a nosotros. A los editores de Honi Soit realmente les gustaría respirar tranquilos y sólo la Universidad puede solucionarlo.
Si actualmente trabaja o ha trabajado en el sótano de Wentworth y se ha visto afectado negativamente por problemas de moho, comuníquese con el SRC.